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La crisis de la industria automovilística provoca el ajuste de las fábricas europeas.
Renault anunció el cierre de la factoría de coches de Valladoliz durante 10 días y de la planta de Palencia durante 14 días para ajustarse a la caída de demanda.
La noticia ha sorprendido a los sindicatos españoles que esperaban que los ajustes de días anteriores fueran los últimos.
El ajuste en España se aplicara mediante el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) temporal que la empresa pactó con los sindicatos.
Las ventas de coches cayeron en octubre un 14'5% y encadenan 6 meses de retrocesos consecutivos.
El resto de compañías automovilísticas también se estan ajsutando a la cruda realidad del mercado provocando una cascada de ERE's y produciendose reajustes en toda europa.

¿Por qué?
El porqué lo debemos buscar en los datos, concretamente en la caída de la demanda que en este último mes fue de un 14'5 y nos preguntaremos el porqué de esta caída.
Son muchos los factores que han podido afectar:
Como todos sabemos el recorte de palntilla está a la orden del día, como también la desaparición de empresas, pequeños negocios, que provocan que no entre dinero en las casas de tantas familias que ven recortada también su cesta de la compra.Por lo que una familia que ve reducidos sus ingresos a un sueldo, o en el peor caso a ninguno, no se le va a pasar por la cabeza la compra de un coche, con todo el gasto que ello supone.
Otro factor es la pérdida de confianza en el mercado por parte del cliente. Aún las familias de nivel adquisitivo medio desconfían, y la gente prefiere ahorrar el dinero, aunque sea poco, para cuando lleguen mejores tiempos, o para tiempos peores, que ahora mismo nunca se sabe cuando te puede llegar el momento de pasarte por la oficina de empleo.
Esto a las automovilísticas les causa grandes pérdidas que en pocos casos llegan a cubrir sus gastos, y eso a cualquiera le molesta.
Esperemos no se formulen más eres y salgamos de esta crisis financiera, de falta de consumo, de falta de producción, de paro,... Demasiadas crisis, que sabemos su origen (EEUU) pero nadie sabe donde acabará. o mejor dicho, acabará en buen puerto, aunque no sabemos cuantos barcos se tendrán que hundir para ello.

Fuente: El Expansión

Firmado: José Bueno